TARQUINIA Galería

Viña del Mar| Chile
Director | Christian Jander

La Tarquinia Art Gallery fue fundada como un punto de encuentro para amantes del arte, ofreciendo una amplia selección de obras exclusivas de artistas nacionales e internacionales consolidados. Dedicados a fomentar el crecimiento y desarrollo del arte, buscamos constantemente nuevos talentos y propuestas artísticas innovadoras que contribuyan al avance de las artes visuales.

https://tarquinia.cl/


ESTE ARTE 2025 | Lorenzo Moya

Lorenzo Moya

BIO

A lo largo de su carrera, Lorenzo Moya (1967, Santiago de Chile) ha recibido numerosos premios, incluyendo la beca Amigos del Arte, el primer lugar en el Concurso de Mural de la Asociación Chilena de Seguridad, una mención honorífica en la Bienal de Buenos Aires, el primer lugar en el concurso Energía y Luz de Enersis, el primer lugar en el Concurso Nestlé y el premio Alcatel Amigos del Arte en Santiago, Chile. También fue seleccionado para participar en el concurso Si la Tierra Pudiera Hablar, lo que le permitió exponer en el Museo de Arte de las Américas en Washington, D.C., Estados Unidos.

La obra de Moya a menudo transita entre figuras humanas y paisajes, adoptando un estilo figurativo y naïf que crea una poética misteriosa en cada imagen. Su profunda conexión con la naturaleza se ha convertido en un rasgo distintivo de su trabajo. Más que simplemente pintar paisajes, Moya se sumerge en la naturaleza, invitando al espectador a un viaje que va más allá de la realidad física. Sus obras, con sus colores vibrantes, texturas y formas puras, ofrecen una experiencia que trasciende lo material, capturando la vitalidad de la naturaleza en su estado más esencial.

CURATORIAL

A medida que las voces contemporáneas llaman la atención sobre la crisis climática, la naturaleza recupera un papel central en el arte. Fieles a su esencia, los artistas se sitúan a la vanguardia, asumiendo la responsabilidad activista de revelar la urgencia de esta crisis. En este cuerpo de trabajo, la naturaleza misma se convierte en el sujeto, sus paisajes autosuficientes y autónomos. Aquí, el artista nos transporta a través de vastos territorios apenas tocados por la mano humana, compartiendo la exuberancia de la biodiversidad que ha experimentado de primera mano. Sus obras a gran escala sumergen al espectador en entornos que palpitan con vida, presentando la naturaleza no solo como un telón de fondo, sino como una experiencia sensorial.

Utilizando encuadres cerrados y una profundidad espacial limitada, el artista captura un sentido visceral y táctil del lugar. Somos invitados a respirar la niebla omnipresente, sentir el crujido de las hojas bajo nuestros pies, vislumbrar la luz filtrándose entre las ramas, tocar el brillo del agua y disfrutar del resplandor de la nieve. A través de esta obra, destila un diálogo contemplativo y silencioso: un homenaje reverente a la abrumadora inmensidad verde que nos rodea, llamando a los espectadores a conectarse profundamente con el mundo natural.